Punto de encuentro entre los caminos que comunican la Meseta, el mar Cantábrico y el mar Mediterráneo, la provincia aragonesa de Zaragoza no es sólo un lugar estratégico.
En las comarcas zaragozanas han confluido a lo largo de la historia diversos pueblos y culturas, los cuales han dejado un destacado patrimonio cultural y artístico árabe, mudéjar, renacentista y barroco.
Se trata de una provincia muy fértil, donde el agua está siempre presente. No sólo porque el caudaloso río Ebro la atraviesa de un extremo a otro, también por sus otros ríos, lagunas, lagos e incluso cascadas.
Para los amantes de la fotografía, la provincia de Zaragoza les reserva numerosos atractivos monumentales y bellos espacios naturales, además de sus peculiares festividades y tradiciones.