La naturaleza de Cantabria está determinada por su ubicación, entre mar y montaña, y por su clima oceánico húmedo y suave.
Las tierras cántabras son una sucesión continua de magníficos espacios naturales. Montañas, ríos, valles, acantilados, grutas y playas se conservan en estado puro para ser admirados por sus visitantes y captados por las cámaras.
Cantabria forma parte de la España Verde, pero también de la España Mesetaria. Cientos de rutas recorren esta magnífica comunidad española desde la costa a las montañas, haciendo las delicias de los amantes de la naturaleza y de los aficionados a la fotografía.