La Costa Azul francesa está considerada como una de las más glamorosas del mundo. El cine la ama, y la cámara fotográfica también. Sus preciosos paisajes, sus elegantes poblaciones o su agradable clima son algunos de sus muchos encantos.
La Costa Azul se extiende desde los departamentos del Var y de los Alpes-Maritimes hasta la frontera italiana y San Remo. Son 110 kilómetros de costa los que separan la población de Saint-Tropez de Mónaco. Llama la atención la proximidad que existe en esta zona entre el mar Mediterráneo y la cordillera de los Alpes, con cumbres que llegan a los 3.000 metros. El conjunto resulta de lo más fotogénico.
Además de ciudades tan populares como Niza o Cannes, en la Costa Azul de Francia se hallan pueblos tan bellos como el de Grasse, capital mundial del perfume, que está ubicado a 750 metros de altitud. Desde esta altura se pueden realizar unas fantásticas fotografías panorámicas de toda la costa y sus alrededores.
Otros recomendables objetivos para nuestra cámara en la Riviera Francesa son las localidades de Antibes, Menton, St Raphael, Saint-Tropez, Peillon, Gordes, Le Barroux, Saint-Paul-de-Vence o Cassis, donde hay unos imponentes acantilados.
Desde la Costa Azul podemos acercarnos a los Alpes, donde descubriremos el Valle de las Maravillas, o la Vallé des Merveilles en francés, que es la puerta de acceso al maravilloso Parque Natural de los Alpes Marítimos.
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