Azalea. Una flor para cada virtud

La azalea es un arbusto del cual existe la versión de hoja perenne y la versión de hoja caduca. Aunque las flores nacen independientes, el abundante colorido de este arbusto hace pensar en infinitos racimos, ya que en la época de floración quedan cubiertos por sus flores.

El origen de la azalea se encuentra en la región del Cáucaso, aunque se cultiva en todo el mundo. Para su crecimiento, requiere un suelo bien drenado, un clima fresco y una localización a la sombra, evitando todo lo posible la luz directa del sol.

La flor de la azalea significa templanza, una virtud que en religión alude al hecho de moderar los apetitos y a no dejarse llevar por los sentidos, sujetando los instintos a la razón. Azalea, la palabra que le da nombre, proviene del latín.

Aunque ni el arbusto ni muchos de los componentes de la flor son tóxicos, en la corola hay una sustancia venenosa para el ser humano. Debido a ello, la miel de abejas elaborada a partir de azalea no es apta para el consumo humano ya que contiene una toxicidad extrema.

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