Son numerosos los monumentos que adornan la villa de Madrid, fruto, muchos ellos, de la voluntad de reyes y gobernantes.
La zona centro aloja lo que se viene a llamar el Madrid de los Austrias. Engloba todas aquellas construcciones llevadas a cabo durante el reinado de los Habsburgo, cuya rama española se extinguió en 1700, con la muerte de Carlos II.
La capitalidad dota a Madrid de una huella cultural importante, muy bien representada por sus museos, con la pinacoteca del Prado a la cabeza.
Además, bellos edificios pueblan sus calles, siendo muchos de ellos sede de organismos oficiales, sin olvidar los cientos de estatuas que adornan la ciudad.